Esta práctica revolucionaria aprovecha el poder de movimientos seguros, sutiles y sofisticados para calmar el sistema nervioso, aumentar la autoconciencia, ampliar el repertorio de movimientos y mejorar la flexibilidad, resistencia y vitalidad. Cuando todo el cuerpo coopera en el movimiento, y cuando se logra la máxima eficiencia con un mínimo esfuerzo, obtienes la energía para liberar la creatividad e intuición que hay en ti.